Me senté en su cauce a oír las rocas,
Pero solo oí su canto que me sumergió en el sueño.
Tan profundo me dormí que caí en sus brazos,
Deje de ser yo e intercambiamos los cuerpos.
Realmente no sé si lo que intercambiamos fue el alma o el cuerpo,
Pero tuve sangre de río en algún momento.
Sentí también temor a aquel depredador al que llaman hombre,
El ser maligno y manipulador que solo piensa en su presente.
Sé que le dio un poco de asco sentirse humano,
Y por respeto a mí no osó en suicidarse.
Pero le tentó la corriente como muerte maravillosa,
Para volver a ser parte de ese dios omnisciente.
Al ser río fui todopoderoso, tan real, tan imponente.
Fui vida, fui paz, fui rumor, fui corriente.
Al ser río fui parte del mundo sencillo,
De ese mundo que no necesita truecar esos inmundos billetes verdes.
Si todos pensáramos como río, ¡ay que mundo más diferente!
Si tuviéramos alma de río, no correríamos la misma suerte
me encanto demasiado de verdad!!...
ResponderBorrarsiento cada palabra cuando lo leeoo!!...
podrian leerlo aquellas personas que desean matar el lugar que te inspiraron estas palabras!!
no a la punilla!! =D
Nicol Silva